Del informe de la CEV (décimas)

© Jorge Salazar Isaza. Foto: Annie Drese.

(1)
Comisión de la verdad:
una palabra que asusta,
olvidar la causa justa
buscar la comodidad
del cerebro en oquedad.
Vivir de espalda al país
sin ir nunca a la raíz,
como si esto fuera Suiza
tengo mi maría luisa
no importa si te morís.

(2)
Desconocer el conflicto
puede llamarse ceguera
propicia a la matadera,
la ignorancia busca adictos
a todos vuelve convictos.
Profunda verdad esconden
los muertos sin quién los ronde,
cometido del informe
(sin importar uniforme)
decir cómo, cuándo y dónde…

(3)
Se escabullen las palabras
por tu horror, caro Luzbel,
le das tiros a granel
al niño que cuida cabras,
con ellos su tumba labras.
Levanta mano el infante
pa’ calmar eco tronante
de las armas en furor.
¡Qué se levante un clamor
de su sangre rutilante!

(4)
Matan y comen del muerto,
la violencia engolosina
ella todo contamina,
no se trata de un entuerto
son negocios en concierto.
Los señores de la guerra,
pelos de la misma perra,
ellos mismos son pandemia:
de Margó, Teresa, Cenia…
nadie sus hijos entierra.

(5)
Aprendemos geografía
con el informe de marras,
mil y un testimonio narras
sinsabores a porfía
del país radiografía.
¡De cuánto dolor tú sabes!
Pa’ entender propones claves:
“Hay futuro si hay verdad”
nos arrojas claridad,
aparecieron las llaves.

(6)
Las cifras escalofriantes
pelechan con este abono:
del Estado el abandono,
dirigentes atorrantes,
ensalzar los ignorantes.
Sin olvidar el desprecio
por los jóvenes tan necios,
por los indios desechables,
los pobres sacrificables
en el altar del silencio.

(7)
Nueve millones de víctimas
por un conflicto matrero,
de sangre enorme reguero
cubre de pena las ánimas,
ya se acabaron las lágrimas…
¡Tantos muertos insepultos!
En la noche se ven bultos
que claman por una tumba,
cualquier país se derrumba
con tanto crimen oculto.

(8)
Allí no cuecen ladrillo,
ya son hornos crematorios
que evitan todo velorio,
las víctimas en polvillo
desaparecen, sencillo.
Vergüenza del ser humano
parece amasado en guano,
dedicado a matar gente
sacrificio de inocentes,
pregunte por El Iguano.

(9)
La Verdad y la Mentira
se encontraron en el puente,
la Mentira, muy decente,
le cede el paso y la mira
con ojos cargados de ira.
La Verdad no se percata
de la trampa que la mata,
un falso tablón se raja
y la pobre cae sin mortaja,
solo queda su alpargata.

(10)
Los hallazgos y consejos
de la comisión de la Verdad
constituyen heredad:
un conjunto de trebejos
que bien nos sirve de espejo.
Aquí se termina este ente,
nos brinda un trabajo ingente
pa’ avanzar hacia la paz
con legado contumaz:
la víctima es inocente.

Fin